Argentina es un país acostumbrado a las intrigas políticas y las dificultades socioeconómicas. Pero incluso para los estándares argentinos, 2023 mantuvo a la nación al borde de su asiento. Durante el año pasado, nos derretimos en una ola de calor de cinco meses, vimos una sequía acabar con la cosecha y las reservas internacionales de Argentina, y presenciamos cómo la inflación se disparaba más allá de la marca del 100% por primera vez en más de tres décadas.
Llegó a un punto crítico en la temporada electoral, una montaña rusa en la que el economista libertario de extrema derecha Javier Milei, un outsider político que saltó a la fama como experto en televisión, sorprendió a todos con una cómoda victoria en la segunda vuelta presidencial de noviembre.
Las explosivas últimas semanas del año marcaron un rumbo claro para 2024. Milei pasó los primeros días de su presidencia ocupado anunciando un decreto presidencial constitucionalmente cuestionable y un enorme proyecto de ley que busca reformar las estructuras fundamentales del sistema económico y político de Argentina, barriendo con décadas de Tradición peronista a favor de una privatización masiva y una legislación laboral “flexible”.
Mientras llegamos al 2024, una retrospectiva de la cobertura del Herald en 2023 nos muestra que, si bien no se puede predecir el futuro, especialmente aquí, mirar hacia atrás nos ayuda a mirar hacia adelante.